A finales del siglo pasado la Universidad de Santiago de Compostela inició las obras para la adaptación de una antigua propiedad para ser la sede del Vicerrectorado de Lugo. Durante las mismas se descubrió el que sería uno de los más importantes hallazgos arqueológicos de la ciudad, la Domus del Mitreo.

Este pequeño museo contiene los restos de una domus datada en el siglo II, aunque fue reformada en III para añadir un primer piso y un templo dedicado al dios Mitra.

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El culto mitraico:

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El culto mitraico es de origen oriental y tuvo mucho éxito entre la milicia romana y aunque existen muchos restos arqueológicos es poca la documentación escrita sobre el mismo. Está basado en la transmisión oral y ritual, y al ser una religión mistérica los iniciados estaban atados por el secreto de los rituales del culto.

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El Mitreo es un templo de dicho culto y aunque normalmente se hacían en cavernas naturales, se hicieron posteriormente imitaciones artificiales, como la que había en Lugo. Son por lo tanto lugares sin iluminación natural, oscuros y pequeños. Su principal icono es el Dios Mitra, tocado con un gorro frigio, agarrando por los cuernos al Toro primordial, que sacrificó con un cuchillo tras transportarlo hasta la cueva.

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La domus:

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En cuanto a la Domus, es una casa de un alto cargo romano en la ciudad, de la que se conservan pinturas y restos más que notables, teniendo en cuenta que el terreno lucense es poco dado a la conservación de este tipo de hallazgos. La casa fue demolida conscientemente ya que fue expropiada para la construcción de la Muralla de Lugo, y de ahí que se conservase tan bien.

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En la primera planta del museo hay un pequeño expositor que relata la excavación de la Domus y las diferentes capas históricas que se encontraron allí, ya que además de dicha casa hubo un cementerio medieval, un paseo de la época romántica y un aserradero en la época moderna.